Formas de aprender.

por Maribel González Martínez

Aunque haga tiempo que no escribo, no quiere decir que haya abandonado este trabajo de rebuscar, investigar y averiguar cómo es el aprendizaje.  Este es un proceso que me intriga y por el que los alumnos preguntan: ¿Cuánto tiempo tardaré en aprender? ¿Es normal que me suceda esto? Además, en los últimos meses he vuelto a mi faceta de alumna, lo que me ayuda a no perder perspectiva. Cuando pasas mucho tiempo ejerciendo el rol de profesora terminas por perder de algún modo las sensaciones que se experimentan cuando estás al otro lado, como esa inseguridad provocada por la novedad mezclada con ganas de experimentar con ella.  (Anda, ya estoy planteando la situación de clase como si fueran dos espejos. Lo que me recuerda aquella cita: Mis alumnos son mi espejo).

Además de volver a ser alumna, no he dejado de recoger o recolectar todo tipo de informaciones que hablan sobre el aprendizaje de idiomas o aprendizaje en general. Aquí dejo varios de esos enlaces:

  1. Laissez Faire, creatividad y aprendizaje, publicado en el Caparazón. Creo que hay que tener muy en cuenta este artículo se nos recuerda que tenemos una cultura de aprendizaje determinada y eso influye en nuestra forma de enfrentarnos a ella o de proyectarla en los demás. Por eso siempre me ha parecido interesante explorar mis creencias y experiencias sobre el aprendizaje.

Sabiendo esto, es más importante que nunca, para dar a los niños capacidades notables, dejar emerger y desarrollarse al aprendizaje espontáneo. El mejor ambiente de aprendizaje será un mundo rico, estable y seguro, con afecto y apoyo de los adultos y un montón de oportunidades para la exploración y el juego.

  1. Por qué aprender no es un castigo, publicado en Coaching para jóvenes.  Curioso que tengamos tendencia a asociar el aprendizaje con castigo. ¿Los castigos no se les imponen a aquellos que transgreden las normas? Entonces, ¿qué pecado hemos cometido para que nos obliguen a estudiar? Además, los castigos se imponen, ¿no? Es decir, que si consiguiésemos desligar este tipo de conceptos cambiarían las cosas. Y al hilo de esto me pregunto: ¿Por qué los estudiantes de letras éramos peor considerados que los de ciencias? (¿Por qué decir: el que vale, vale y el que no para letras?)
  2. Aprendizaje, un programa de tres14 emitido en TVE2. Una curiosa mirada sobre esto de la educación.
    1. Se recogen una serie de enlaces y sugerencias bibliográficas.
  3. Los niños bilingües, publicado por La Frikitva. Desde ahí enlazaremos con un artículo muy interesante sobre bilingüismo.
    1. Aparece una interesante metáfora donde las lenguas se equiparan con el crecimiento de un árbol.
    2. Una de las conclusiones es la importancia de la cantidad de tiempo que pasamos expuestos a un idioma.
  4. Ldelengua 43: Bitácora. Sí, se trata de la promoción del nuevo manual de Difusión y se hablan de temas muy interesantes relacionados con él. Por ejemplo, Neus Sans comenta que el aprendizaje es un proceso individual en tanto que es un proceso interno del individuo (cada uno tenemos nuestras estrategias de aprendizaje, nuestras experiencias previas) y por otro lado, se trata de una actividad social porque necesitamos de otros para desarrollar nuestras habilidades.

También dejo por aquí todo lo que he ido escribiendo sobre el proceso de aprendizaje para ver el camino que he ido recorriendo.

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2 comentarios to “Formas de aprender.”

  1. Hola Maribel, hace tanto que no sabía de tí. Como siempre tus posts son interesantes, me alegra que estés de alumna, es que cuando una regresa a esa faceta siempre aprende algo. Yo me siento tentada a reaccionar sobre los niños bilingües pues el bilingüismo siempre me ha intrigado. Según mi experiencia con mi hijo de 5 años, creo que es un proceso especial y se da cuando hay muchos factores que lo favorecen. No es automático y estoy de acuerdo con quien dice que hay que necesitar una lengua para hablarla y en el caso de los niños no puede ser más cierto. Da mucho trabajo lograr que tu hijo sea bilingüe, yo le corrijo las faltas todo el tiempo y felizmente no lo toma a mal. Como el padre habla muy bien el español y lo hablamos dentro de casa más que el francés, el niño lo habla muy bien además del francés. Pero si yo fuera la única hispanohablante, creo que sería mucho más complicado. Tengo amigas y colegas de otras nacionalidades que tienen varios hijos y me han dicho que no todos los hijos terminan hablando igual de bien una segunda lengua, lo que reforzaría la creencia de que hay gente con dotes especiales para los idiomas y otros bueno no tanto.

    Un beso Maribel y gracias de nuevo por actualizar!

    Claudia

    • Hola Claudia:

      Me alegro de que te haya parecido interesante el post. Gracias por contar tu experiencia con el bilingüismo porque es interesante contar con experiencias. A mí hay algunos fenómenos que he observado en alumnos escolarizados aquí cuyos padres son de otra nacionalidad que me parecen interesantes. Como tener como lengua materna el inglés y ser alfabetizado en español, lo que produce que el niño, por ejemplo, se enfrente a un texto en inglés como si fuera en español. Es decir, que descodifica el texto inglés usando las reglas para el español. Evidentemente, esto tiene su explicación pero el primer día que lo ves resulta chocante.

      Besos para tí también y miles de gracias por comentar :).

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